Expertos económicos, como Martín Rapetti, señalan que el plan actual de estabilización de Javier Milei no es suficiente y anticipan desafíos significativos. Rapetti proyecta una inflación mensual cercana al 20% en el primer cuatrimestre y advierte sobre posibles tensiones en el mercado del dólar. La reciente negociación con el FMI no ha disipado las incertidumbres para Wall Street e inversores locales.
El tiempo de espera se extiende hasta mediados de año, enfocándose en la dinámica inflacionaria y la gobernabilidad del nuevo gobierno. La aprobación de la Ley Ómnibus en el Congreso será crucial para medir el margen de maniobra de Milei y su equipo.
Otro desafío crucial es la dinámica fiscal, especialmente alcanzar el superávit comprometido con el FMI. La suspensión de la fórmula jubilatoria genera dudas sobre la capacidad de cumplir con esta meta. La recaudación impositiva, afectada por la recesión, también plantea interrogantes sobre la sostenibilidad del superávit.
El mercado mantiene la atención en la cosecha como un activo clave para el gobierno en el corto plazo. A pesar de las expectativas de ingresos positivos, la presión cambiaria persiste debido a diversos factores, como la demanda de dólares y la incertidumbre política asociada a la Ley Ómnibus. El destino de esta mega ley se percibe como determinante para la gobernabilidad inicial de la administración Milei.