El pasado viernes, el Ejército de Israel admitió haber matado “por error” a tres rehenes, entre ellos el argentino Alon Shamriz, de 26 años, secuestrados por la organización terrorista Hamas el 7 de octubre en la Franja de Gaza. Además de Shamriz, fallecieron Yotam Haim, de 28 años, y Samar Talalka, de 24 años. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) revelaron que los capturados ondearon una bandera blanca y pidieron ayuda en hebreo.
La investigación preliminar sugiere que los rehenes escaparon o fueron abandonados por los terroristas de Hamas cuando las FDI se acercaron. Este incidente generó protestas en Tel Aviv, donde familiares de otros secuestrados expresaron su repudio y exigieron un acuerdo. Las pancartas rezaban: “Todos los días muere un rehén”. Alon Shamriz, de nacionalidad argentina, era estudiante de ingeniería informática y fue secuestrado durante el ataque a su kibutz en octubre. Su familia vivió en la incertidumbre desde entonces.
El abuelo de Shamriz lo describió como un joven simpático y dado. Este trágico episodio aumenta la tensión en la región y destaca la complejidad de las situaciones en zonas de conflicto.
Fuente: Nexofin
