Las predicciones para el año 2024 presentan un escenario inquietante en caso de que Sergio Massa gane las elecciones, augurando un estallido inflacionario sin precedentes. Los precios continúan su ascenso imparable, erosionando el poder adquisitivo, mientras el Ministro de Economía del kirchnerismo no ofrece soluciones concretas para los meses venideros.
En solo 15 meses de gestión, el kilo de asado ha pasado de $1.200 a $3.000 en la Capital Federal y sus alrededores, llegando a alcanzar los $4.000 en el interior del país, marcando un incremento de entre 140% y 220%, según la ubicación geográfica.
Si Massa permanece en el cargo durante otros cuatro años, se proyecta que el kilo de asado podría alcanzar cerca de $9.000 para diciembre de 2024, manteniéndose la actual tendencia alcista. Sin embargo, las consultoras privadas estiman que la inflación podría acelerarse aún más, con el informe de expectativas REM del Banco Central pronosticando una inflación superior al 200% para el primer trimestre de 2024.
Moody’s, la calificadora de riesgo, anticipa un mínimo del 275% para la inflación de diciembre del próximo año, superando el 180% previsto para el cierre de 2023. Asimismo, proyecta un declive del 2,5% en la actividad económica en 2024 si Massa resulta victorioso, generando caos social e incertidumbre económica.
La consultora Orlando Ferreres sugiere que el valor del dólar oficial podría llegar a los $2.885 a finales de 2024, dejando a la imaginación el posible valor del dólar Contado con Liquidación (CCL) o el dólar paralelo para esa fecha.
El mismo patrón de aumentos extremos podría repetirse en las tarifas de servicios públicos. Con aumentos superiores al 500% en las facturas de agua y porcentajes significativos en electricidad y transporte público durante la gestión de Massa, se plantea la posibilidad de que las tarifas continúen su ascenso en 2024, generando un ajuste salvaje que impactaría directamente en la sociedad argentina.