Tras el impacto inicial de la victoria de Sergio Massa en la primera vuelta, el oficialismo intentó crear la percepción de que Javier Milei podría bajarse de la carrera. Sin embargo, las últimas encuestas que miden el escenario para el balotaje señalan un panorama equilibrado, incluso con Milei ligeramente por delante. A dos semanas del enfrentamiento decisivo, el resultado sigue siendo incierto.
Entre las elecciones generales del 22 de octubre y el balotaje, se han publicado nueve encuestas nacionales realizadas por ocho consultoras diferentes. Seis de estas encuestas muestran a Milei en la primera posición, con márgenes estrechos que van desde 0,2 hasta 3,8 puntos. Las tres encuestas que otorgan ventaja a Massa muestran brechas más amplias, oscilando entre 2,3 y 10,4 puntos. Estas consultoras son en su mayoría bien conocidas en el ámbito político.
Es interesante destacar que una de las consultoras que ubica a Milei en primer lugar, Inteligencia Analítica, está vinculada al cuñado de Massa. Esto ha llevado a especulaciones sobre si el massismo prefiere presentar a Milei como líder para mantener la movilización de sus votantes y evitar un triunfo del economista.
La tendencia más fuerte a favor de Milei proviene de Atlas Intel, con una ventaja que no llega a 4 puntos. Por otro lado, la consultora CIGP muestra una ventaja de 2,6 puntos para Milei, y la consultora que solicitó que no se revele su nombre también le da una ventaja de 2 puntos.
En cuanto a las consultoras que dan ventaja a Massa, Analogías y Proyección otorgan brechas significativas de 8,1 y 10,4 puntos respectivamente. Sin embargo, un estudio de Zuban Córdoba pone a Massa al frente con una diferencia de solo 2,3 puntos.
El aumento en las encuestas a favor de Milei se puede atribuir al hecho de que está captando una parte significativa de los votos que originalmente se destinaron a María Eugenia Vidal y Juan Schiaretti. La tendencia cambió en los últimos estudios, con Massa captando mejor los votos de Schiaretti.
Además, el voto en blanco sigue siendo un factor a considerar, ya que ambos candidatos tienen altos índices de rechazo, lo que podría llevar a un voto en blanco significativo, aunque las encuestas no predicen un fenómeno de esa magnitud por el momento. El balotaje argentino continúa siendo impredecible, y todo está en juego en esta contienda reñida.