Las casas de cambio en Paraguay alertan al Banco Central sobre la constante fuga de dólares hacia Argentina, lo que amenaza las reservas nacionales.
El peso argentino se ha convertido en una moneda no deseada en las fronteras, lo que ha llevado a una devaluación del 40% en poco tiempo, con tasas de cambio llegando a 1 guaraní por peso argentino. “Argentina no tiene reservas de dólares para comprar insumos o producir medicamentos y piensan dolarizar su moneda, eso es muy peligroso”, advierte Emil Mendoza, presidente de la Asociación Casas de Cambio del Paraguay.
La falta de protección de las reservas de dólares podría desencadenar una inflación descontrolada del dólar en Paraguay, advierte Mendoza, quien cita las proyecciones del P.J. Morgan de Estados Unidos de una inflación del 170% en Argentina para este año. Esto ha creado tensión en el mercado cambiario local y preocupación en la plaza financiera paraguaya.
El mercado informal paralelo en Paraguay involucra a más de 900 cambistas no reglamentados, muchos de los cuales “colaboran con la venta de dólares a argentinos”. Los turistas argentinos pueden cambiar hasta 17 mil dólares en casas de cambio o bancos locales, pero operaciones mayores requieren documentación adicional para verificar el origen de los fondos.
Las casas de cambio paraguayas intentan evitar un escenario similar al ocurrido en Bolivia, donde en mayo de este año se vendió el 50% de las reservas en oro para mitigar la escasez de dólares, causada por un sistema de cambio paralelo y políticas fiscales cuestionables que afectaron al “milagro boliviano”.