A medida que las elecciones primarias se acercan, el candidato a jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por el Pro, Jorge Macri, ha presentado una propuesta innovadora: reemplazar el sistema de tarjeta SUBE por la posibilidad de pagar el transporte público con celulares o tarjetas de crédito. En un video publicado en sus redes sociales, Macri declara que el sistema actual de la SUBE, instaurado en 2009, se ha vuelto obsoleto y dificulta a los usuarios, especialmente a los turistas, acceder al transporte público.
Bajo el lema “Chau SUBE”, Macri sostiene que el mundo ha avanzado en materia de tecnología de pagos y que la Ciudad de Buenos Aires debería adaptarse a esta tendencia. Propone permitir que los ciudadanos utilicen sus teléfonos celulares o tarjetas de crédito para pagar su pasaje en el transporte público, agilizando y modernizando el proceso de pago.
Sin embargo, el Ministerio de Transporte respondió a la propuesta de Macri, señalando que la regulación de los medios de pago en el transporte público está en manos del Gobierno Nacional. Aclararon que en las líneas de subte, que son competencia de la Ciudad de Buenos Aires, el gobierno local puede tener cierta influencia, pero en las 32 líneas de colectivo de jurisdicción nacional que operan en la ciudad, el sistema de pago está regulado por el Gobierno Nacional a través de la tarjeta SUBE.
El Ministerio de Transporte destacó que cualquier cambio en los métodos de pago podría afectar a los 7 millones de personas que se benefician de la RED SUBE, un esquema de integración de diferentes modos de transporte público que ofrece descuentos a los usuarios que realizan combinaciones en un período de tiempo determinado.
La propuesta de Jorge Macri, aunque innovadora, enfrenta desafíos en términos de regulación y coordinación entre los diferentes niveles de gobierno involucrados en el sistema de transporte público en la Ciudad de Buenos Aires.