A tan solo cuatro días del cierre de listas, la lucha por descartar a Daniel Scioli de la carrera presidencial está alcanzando su punto más álgido en la Provincia de Buenos Aires. Con una falta de liderazgo que ordene el escenario, el conflicto ha adquirido un carácter formal, centrado principalmente en el reglamento interno del partido que establece los requisitos, regula los avales y estructura las boletas. En las últimas horas, los intendentes bonaerenses también se sumaron a la operación “Candidato Único”. El mensaje, encabezado por Martín Insaurralde y difundido por varios voceros, fue claro: si no había una lista de unidad, es decir, si Scioli no se retiraba, solo respaldarían al candidato que Cristina Fernández de Kirchner designara en los próximos días. “Scioli no tiene una estructura para presentarse en los 135 distritos de Buenos Aires, y si lo hace, será una estructura débil”, afirmó el intendente de Pehuajó, Pablo Zurro, expresando en voz alta lo que muchos dirigentes de la alianza K-M venían susurrando en los últimos días. Mientras tanto, en el equipo de Scioli resisten y se preparan para impugnar: “Nosotros iremos hasta el final”, repiten.
El primero en lanzar la advertencia fue el jefe de Gabinete bonaerense y socio político de Máximo Kirchner, Martín Insaurralde, quien dejó trascender en una conversación con LaPoliticaOnline: “Queremos una lista de unidad y si hay elecciones primarias, iremos solo con la lista de Cristina”. Este ultimátum fue seguido por un comunicado firmado por 17 intendentes peronistas que expresaron su deseo de tener una lista de unidad. En el documento, dirigentes como Alberto Descalzo (Ituzaingó), Ariel Sujarchuk (Escobar), Federico Achaval (Pilar), Gustavo Menéndez, Juan Ustarroz (Mercedes), Leonardo Nardini, Lucas Ghi (Morón), Mariel Fernández (Moreno) y Juan Zabaleta (Hurlingham) advirtieron: “Si no logramos la unidad en las listas provinciales y nacionales, no seremos funcionales a estas divisiones y apoyaremos a la lista que represente el proyecto político que deseamos, no participaremos en ambas”. El gobernador Axel Kicillof compartió el comunicado, confirmando así su alineación estratégica provincial en caso de no ser convocado a nivel nacional, una posibilidad que aún está presente en La Plata y que dependerá de la bendición final de CFK.